Reseña: The Dirt - La historia de Motley Crue
Durante la década de los setenta y ochenta la escena musical
del heavy metal y el rock estaban pasando por su mejor momento con la aparición
de bandas como Queen, Led Zepelin, AeroSmith, Van Helen y un sin fin de etcéteras.
Pero hubo una banda que se caracterizó más por sus escándalos mediáticos que
por su propuesta musical y esta es Motley Crue.
Recientemente
Netflix estreno The Dirt, la película
biográfica de Motley Crue, la cual retrata la vida, obra y pormenores de la
banda. Esta es una biopic explicita pero no correcta en el buen sentido de la
palabra, al no ser complaciente al retratar los diferentes aspectos de la vida
de Nickky Sixx, Mick Mars, Tommy Lee y Vince Neil.
La película dirigida
por Jeff Tremaine, quien ya había dirigido Jacckas,
trae a la pantalla una cinta sucia en todo el sentido de la palabra que no se
va con miramientos para retratar con total honestidad y con parte de ficción la
imagen de Motley Crue.
The Dirt inicia con un relato en de Niccky Sixx describiendo su infancia y su adolescencia, y como la influencia del Punk fue determinante para su manera de ver el mundo, sumando los constantes abusos y maltratos por parte de los diferentes novios que tuvo su madre quien reiterativamente le decía que él era el culpable del abandono de su padre.
Una de las cosas que la hace exquisitamente repulsiva es no
ser benévola con sus personajes e indulgente como lo fue Bohemian Raphosody,
que a pesar de ser una muy buena película solo se centra en le figura de Freedy
Mercury a quien nos venden como el mal mayor y los demás integrantes son
mostrados como unos amorosos esposos y padres de familia. Al contrario acá,
desde un principio todos sus personajes están rotos dejando ver todas sus
imperfecciones pero también todos sus dotes.
A lo largo de la hora y cuarenta cinco
minutos que dura la película, seguiremos de cerca con un ritmo frenético cada
una de las locuras de la banda y aspectos de la personalidad de cada uno de los
miembros. Como la adicción al sexo por parte de Vince Neil o la tendencia que tiene Tommy Lee de
maltratar a las mujeres, aunque él se muestre como un romántico empedernido,
tambien el constante abuso de drogas de Nickky Sixx y la parsimonia de MIck Mars a causa de su
problema de esclerosis, pero que no le impedía beber como un cosaco.
Aunque la película tiene momentos de ficción como la aparición de Ozzy Osborne
durante una de las giras, esto le da ese toque bizarro que caracteriza a la
cinta logrando amalgamarse con los momentos crudos por los que atravesó la
banda: como la muerte de su amigo y baterista Nicolas Dingley, también conocido como
"Razzle" a causa del homicidio involuntario de Vince en un accidente
de tránsito o la muerte de Skylar, la segunda hija de Vince.
Todos estos elementos en conjunto con las escenas donde se aprecia el abuso de las drogas, que en un principio pueden parecer jocosas dándole valides a la frase "sexo, drogas y Rock and Roll”, poco a poco empiezan a pasar factura a cada uno de los integrantes.
Esta cinta lejos de ser perfecta, logra
que el espectador conecte con los personajes para después despreciarlos y
finalmente sentir lastima de ellos, pero sin convertirse en una especia de
comedia cursi sobre la reivindicación, porque al final todos ellos siguen en
las mismas.
Por otro lado, uno de los grandes ausentes es la música. A
pesar de ser una película sobre Motley Crue no se explica mucho sobre sus
canciones. Vemos los conciertos, las giras y las groupies pero no el proceso
creativo de por lo menos una de sus canciones. Pero tal vez la visión del
director era mostrarlos a ellos como individuos y no como artistas.
Hacer una película sobre una banda no siempre es fácil, ya hemos tenido
experiencias como The Doors de Oliver
Stone, que sin ser una mala película siempre deja un sin sabor, pero se destaca
la actuación de Val Kilmer o de Bohemian
Raphsody que es extremadamente benévola, pero como en The Doors, se destaca la actuación de Rami Malek. Las dos cintas
comparten algo y es que las dos muestran sus facetas creativas como banda, cosa
que pasa por alto The Dirt.
Lastimosamente,
Motley Crue es una banda que no estuvo excepta de polémica a raíz de sus escándalos
y enfrentamientos con otras agrupaciones, tanto así que fue excluida y mirada
de reojo por parte de sus colegas, haciendo que esta sea más conocida por sus escándalos
que por su propia música.
The Dirt es una de esas cintas BlockBuster que parece que no tiene nada que ofrecer, perlo logra destacar cuando se mete al barro y se ensucia para encontrar esas imperfecciones que la hacen única.
Si lo retratado en el film por Jeff Tremaine es 50% real, solo queda
decir que es un milagro que estos tipos sigan con vida.
Leave a Comment